Cuando paso una tarde con amigos o familiares me gusta profundizar en temas interesantes.
No me refiero al tema vacunas.
Ni noticias de la COVID,
toques de queda o restricciones
Tampoco de goles,
coletas o giros a la ultraderecha
Me refiero a temas importantes de verdad.
Y por eso a mis amigos me gusta preguntarles si están cumpliendo su proyecto vital.
Sí, ese que se marcaron o que marcan diariamente en la búsqueda de tener una vida completa y feliz.
Me encuentro con gente que dice que sí,
que está cumpliendo su proyecto vital, y no me lo creo.
No creo que su proyecto vital implique 2 horas de tráfico y atascos diarios.
Que incluya aguantar a jefes, y a compañeros con menos talento que una piedra.
O que englobe que su opinión en el trabajo nunca sea tenida en cuenta.
No, no me creo que en su proyecto vital recogiera que unas 11 o 12 horas de las 16 horas diarias que está despierto las iba a pasar “de la mejor manera posible” hasta que llegue de nuevo a casa.
La nómina paga deudas. De acuerdo
La nómina da cierta seguridad. Casi de acuerdo
La nómina permite tener un determinado nivel de vida. Nada de acuerdo
La nómina es el látigo del siglo XXI
Y está bien
Está bien porque solo gracias a que hay “esclavos” dispuestos a trabajar por una nómina otros podemos cumplir nuestros sueños creando nuestro propio proyecto.
Tú eliges.
Si quieres cumplir tu sueño, te apuntas aquí abajo y te podré guiar.
Aquí abajo